Una declaración del IRS sobre declaraciones de información publicada en su sitio web el 13 de mayo de 2022 establece lo siguiente:
“Procesamos 3200 millones de declaraciones de información en 2020. Las declaraciones de información no son declaraciones de impuestos y son documentos presentados al IRS por terceros pagadores, no por contribuyentes. 99% de las declaraciones de información que utilizamos se compararon con las declaraciones de impuestos correspondientes y se procesaron. El 1% restante de esos documentos se destruyó debido a una limitación del software y para dejar espacio para nuevos documentos relevantes para la temporada de presentación pendiente de 2021.
No hubo consecuencias negativas para los contribuyentes como resultado de esta acción. Los contribuyentes o contribuyentes no han estado ni estarán sujetos a sanciones derivadas de esta acción.
En términos generales, esta situación refleja los problemas importantes que plantea la tecnología anticuada del IRS. En 2020, el IRS priorizó el procesamiento de las declaraciones de impuestos atrasadas para obtener los reembolsos de los contribuyentes y respaldar otros alivios relacionados con COVID en lugar de ingresar menos de 1% de documentos de información, en su mayoría formularios 1099, que se enviaron en papel.
Las restricciones del sistema requieren que el IRS procese estos formularios en papel antes de que finalice el año calendario en el que se recibieron. Esto significaba que estas declaraciones ya no podrían procesarse una vez que comenzara la temporada de presentación de 2021. No procesar estas declaraciones de información no afectó la presentación de la declaración original por parte de los contribuyentes de ninguna manera, ya que los contribuyentes recibieron su propia copia para usar en la presentación de una declaración precisa.
El IRS procesó todas las declaraciones de información en papel recibidas en 2021 y planea procesar las recibidas en 2022”.